Al menos 11 personas murieron durante un enfrentamiento entre pobladores de la comunidad de Texcapilla, municipio de Texcaltitlán, e integrantes del grupo criminal La Familia Michoacana.
De acuerdo a los primeros reportes, el grupo criminal arribó a dicha comunidad con al menos 10 gatilleros encabezados por el jefe de plaza de la zona identificado como el Payaso para exigirles el pago por derecho de cultivo.
Les exigían la cantidad de un peso por metro cuadrado cultivado de tierra, lo que se traduciría en miles de pesos, ya que son hectáreas que trabajan los labriegos de la región.
Los campesinos rechazaron la extorsión y comenzó una discusión, que terminó en una balacera.
Los delincuentes abrieron fuego con sus armas de alto poder en contra de los campesinos, que se defendieron con machetes y otros instrumentos de labranza y enfrentaron a los delincuentes.
Las camionetas en las que habían arribado los delincuentes y sus cadáveres fueron quemados por los propios pobladores.
La secretaría de seguridad del estado de México confirmó que ocho de los criminales murieron y tres civiles perdieron la vida.
Entre las víctimas mortales se encuentra el delegado de la comunidad Noe Olivares y el jefe de plaza identificado como El Payaso.
Posterior a los hechos, la secretaría de seguridad ciudadana del estado de México y la Guardia Nacional implementaron un fuerte operativo con decenas de elementos en las inmediaciones de Texcaltitlán.
Los pobladores externaron su preocupación que regresaran los criminales, a cobrar venganza por la muerte de su líder e integrantes de la célula criminal, por lo que exigieron que la fuerzas federales y estatales se mantenga el sitio de forma permanente, en esta zona ubicada al sur del estado de México.
Anteriormente ya habían sufrido extorsiones en el mismo sentido, pero en esta ocasión ya no aguantaron más y rechazaron la exigencia de los delincuentes que terminó en este enfrentamiento, con saldo de 11 personas muertas y una cantidad indeterminada de heridos por arma de fuego.