Tras una exhaustiva búsqueda, la Célula de Búsqueda de Valle de Chalco, dio con el paradero de las dos hermanas, menores de edad, Graciela Anahy y Amairani Estephanía Pérez Díaz de 13 y 14 años, desaparecidas la noche del pasado viernes.
Personal de la Célula dio a conocer que las dos adolescentes ya se encuentran en su domicilio, con su madre, en la colonia Cerro del Márquez.
José Juan Martínez Ramírez, director de la Célula de Búsqueda municipal, informó que la tía inició una denuncia por la desaparición de sus sobrinas, momento en el que la madre se encontraba presente por motivos de trabajo.
’Las menores terminaron de cenar -incluso se encontraban ya pijama- cuando salieron a darle de comer a las mascotas… y ya no regresaron’, relató.
En la búsqueda de adolescentes se activó el Protocolo Alba, la dirección de seguridad pública realizó el monitoreo de las cámaras de videovigilancia la policía municipal, ubicadas en las inmediaciones del domicilio de las menores.
PROTOCOLO DE BUSQUEDA DE LAS HERMANAS
El procedimiento de búsqueda, también incluyó perifoneo, difusión por radio a las patrullas de la media filiación de las menores, así como entrevistas a familiares y amigos, lo que permitió crear líneas de investigación, informó por su parte la alcaldesa Arlette Cruz Escamilla.
Las menores se habrían salido por su propia voluntad, debido a problemáticas intrafamiliares -un berrinche, habría provocado que salieran de casa- hipótesis que se reforzó, cuando la madre recibió una llamada de una de las menores, que le dijo que se encontraban bien y que pronto regresarían.
Con la geolocalización de la llamada, con ayuda de la Fiscalía General de Justicia del Estado, se permitió definir un domicilio en la Segunda Sección de la colonia Guadalupana, hasta donde arribaron elementos de la Guardia Nacional. Ahí, un supuesto amigo, les permitió pernoctar.
A las dos hermanas y a la madre, se les brindó atención psicológica médica y más tarde trasladadas a la agencia del Ministerio Público para reportar su aparición las adolescentes que refirieron no haber sido víctimas de algún delito.
Las menores y la madre seguirán recibiendo atención psicológica e incluso podrán acudir a talleres y escuela para padres, destacó Cruz Escamilla.
